Federico Reyes Grande, estudiante del Doctorado en Ciencias en Ecología y Desarrollo Sustentable con orientación en Estudios de Sociedad, Espacios y Culturas, (Generación 2016 – 2019), de ECOSUR Unidad Villahermosa obtuvo el grado de Doctor en Ciencias, el día 22 de marzo de 2021, con la tesis denominada “Volver a la comunidad: Apuntes para una propuesta política de adaptación. Reflexión desde Barra de Tupilco, Tabasco”.
ENHORABUENA a Federico, así como a su Consejo Tutelar conformado por el Dr. Miguel Ángel Díaz Perera (Director de Tesis), Dr. Alejandro Espinoza Tenorio (Asesor), Dra. Dora Elia Ramos Muñoz (Asesora) y Dr. Pablo Marín Olán (Asesor); así como a sus sinodales: Dra. Lilia María Gama Campillo, Dra. Nubia Cortés Márquez y Dr. Sergio Iván Navarro Martínez, quienes comparten esta enorme satisfacción por el logro académico obtenido.
Resumen de la Tesis:
El punto de partida de esta tesis es la política de adaptación humana, que es impulsada a nivel mundial a partir de acuerdos internacionales, de los que destaco la agenda de adaptación, articulada con el desarrollo sostenible. Argumento que este modelo de desarrollo da continuidad al modelo de desarrollo industrial capitalista adoptado luego de haber terminado la segunda guerra mundial, por cuanto que mantiene vigente la lógica de supeditar el bienestar humano al crecimiento económico. En tal sentido, las acciones adaptativas que anima también están orientadas por el mejoramiento económico de las personas, punto en el que convergen con la narrativa neoliberal, que exalta la dimensión económica del hombre como su naturaleza y justifica la competencia en aras de la sobrevivencia, postulado afín a la teoría evolutiva de Darwin. Señalo, en consecuencia, que esta lógica expresa de manera concreta el enfoque determinista en que descansa dicha política y, por ende, su insuficiencia para favorecer procesos de adaptación. En contraste, sugiero una reflexión no determinista sobre la posibilidad de adaptación a partir de reconocer la dimensión política de los seres humanos. Con base en ésta, propongo fortalecer la comunidad humana, espacio vital, de encuentro y recreación, como la condición previa para favorecer procesos adaptativos; esto implica revitalizar los cimientos comunitarios del diálogo, la discusión de ideas, la confianza, la construcción de acuerdos y, en particular, la solidaridad. Tal propuesta descansa en una narrativa que concibe la naturaleza humana como fundamentalmente social, por tanto, rechaza el individualismo, la competencia y el reduccionismo económico. Esta idea es producto del trabajo de campo realizado en la localidad pesquera Barra de Tupilco, municipio de Paraíso, Tabasco, donde los lugareños transitaron de campesinos agrícolas a pescadores, quienes ante las amenazas que enfrenta su actividad, sobre todo por la industria petrolera, ensayan vías de adaptación para seguir siendo pescadores.
Palabras clave: Determinismo, Arreglo institucional, Sostenibilidad, Desarrollo, Solidaridad.