En el marco de la presentación del libro A Toda Teta. Lactancias maternas como fuerza amorosa desde las voces de sus protagonistas de Carolina Guerrero y Georgina Sánchez-Ramírez, se hizo entrega de un merecido reconocimiento a la mexicana Paloma Lerma Bergua, quien ha dedicado más de 40 años de su vida a la misión de formar, informar y acompañar.  Su legado de conocimiento ha inspirado a madres, padres y líderes de la Liga de la Leche en México, con una amplia construcción de redes de lactancia más allá del país.

La velada, que se realizó el pasado 12 de abril, en el atrio del Archivo Histórico de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, estuvo a cargo de Georgina Sánchez Ramírez, investigadora del Departamento de Salud de ECOSUR; Carolina Guerrero León de Lactanciamos  y Liliana López Arellano de Ixchel AC, quienes a través de sus palabras exploraron el tema de la lactancia materna desde diversas perspectivas.

En este homenaje, Carolina Guerrero expresó “A nombre de todas las familias, niños, niñas y profesionistas que hemos tenido el privilegio de escucharte y aprender de ti Paloma, quiero expresarte mi más sincero agradecimiento. Tu dedicación y compromiso en la promoción y protección de la lactancia materna han dejado una huella profunda en nuestras vidas. La lactancia materna es un tesoro fluido y vivo que ha acompañado el desarrollo humano a lo largo de la historia. Sin embargo, enfrenta desafíos constantes, como la publicidad engañosa de los sucedáneos de la leche materna y la desinformación. En tu texto, expones claramente la gran estafa detrás de estas prácticas y cómo afectan a la economía doméstica y la integridad de cientos de profesionales de la salud”.

Posteriormente, Georgina Sánchez hizo entrega del reconocimiento a nombre de ECOSUR.

En palabras de la homenajeada Paloma Lermaexpresó: “Yo soy lo que soy” porque alguna vez, siendo mamá, recibí apoyo tanto durante mi parto como en el proceso del embarazo y la lactancia. Me pareció maravilloso, y decidí dedicar mi vida a hacer lo mismo: ayudar a otras mujeres. A lo largo de estos 40 años, la lactancia materna me ha brindado innumerables experiencias, amor y conexiones con personas que me han capacitado y apoyado. He recorrido el mundo, aprendido a investigar y dominado el inglés, pero, sobre todo, he tenido la satisfacción de sembrar una semillita en cada madre a la que he asistido y en cada profesional de la salud que ha visto la importancia de defender y promover la lactancia.

En esta etapa de mi vida, me encuentro en un lugar donde las circunstancias personales me han llevado a dejar de dar consultas. La razón detrás de esta decisión fue atender a mi madre, y aunque no puedo seguir recibiendo pacientes o realizando consultas a domicilio, siento que no me han dejado ir del todo. Las voces siguen llegando desde aquí y allá, y lo hago con un profundo cariño y gusto.Es un honor para mí saber que tantas personas han recibido un pedacito de mí a lo largo de mi trayectoria. Cada consejo, cada palabra compartida, ha sido un pequeño aporte que he brindado con amor y dedicación. Agradezco sinceramente su presencia en este camino, así como el apoyo de Ecosur por haber hecho posible este evento.También quiero expresar mi gratitud a IFAM en América Latina y a la Liga de la Leche. Ellos han sido parte fundamental de mi formación y crecimiento. Cada uno de ellos ha sido mi maestro, y les debo mucho por su influencia en mi vida”.

La entrega de este reconocimiento fue un momento emotivo y significativo. Su incansable labor en la promoción y protección de la lactancia materna merece ser celebrada y reconocida. Por ello, en este acto, se reafirmó la importancia de seguir tejiendo redes de apoyo y conciencia en torno a este tema fundamental para la salud y el bienestar de nuestras familias.

En la presentación del libro A toda teta, Liliana López Arellano reflexionó acerca de la influencia de diversos actores en la lactancia materna como son el gremio médico, pediatras, ginecólogos e incluso la industria alimentaria. Sin embargo, destacó que existe una voz que a menudo queda relegada: la de las mujeres. En este contexto, exploró cómo la lactancia, que alguna vez fue considerada ideal para la alimentación del recién nacido, ha experimentado un vaivén histórico.

Mencionó que el libro ofrece una introducción fascinante, donde se puede descubrir cómo la lactancia perdió terreno frente a las fórmulas infantiles. ¿Por qué sucedió esto? ¿Qué papel jugaron los datos y los mitos en esta transformación? Mencionó que en el  libro, la frase “los datos matan mitos” hace reflexionar profundamente. Si hay evidencia sólida de que la lactancia es lo mejor para los bebés, ¿por qué no se refleja plenamente en las estadísticas? ¿Por qué, a pesar de la información disponible, algunas mujeres aún enfrentan dificultades para amamantar?

El enfoque de género y salud desde el que está escrito el libro es revelador. Las autoras plantean preguntas cruciales: ¿Son sólo las mujeres las que dejan de lactar? ¿Qué hay detrás de los censos que indican que algunas madres “no tenían leche”? Al adentrarnos en las historias personales de estas mujeres, encontramos miedos, inseguridades y expectativas que merecen ser exploradas a fondo.

Mencionó también cómo el libro nos invita a cuestionar, a escuchar las voces silenciadas y a reconocer que la lactancia materna es más que una simple elección. Es un acto de amor, un vínculo profundo entre madre e hijo, y merece nuestro apoyo y comprensión. El libro conmueve en su manera de abordar el ciclo vital completo: desde el embarazo hasta el parto, el puerperio, el posparto y la lactancia. Donde las mujeres son las protagonistas en un continuo inseparable.

“No podemos ignorar la dimensión social que rodea a la lactancia. Nuestro entorno, desde los profesionales de la salud hasta las estructuras económicas, influye en nuestra experiencia. ¿Por qué, desde el principio, no se nos proporciona información completa? ¿Por qué algunas mujeres enfrentan maltrato o indiferencia?

Las desigualdades también juegan un papel crucial. Las barreras económicas y sociales hacen que amamantar sea un desafío aún mayor para algunas mujeres. El libro nos insta a escuchar la voz de las mujeres, pero también a considerar el contexto más amplio. Podemos brindar apoyo inmediato a nivel individual, pero también debemos reconocer que lo personal es político.

En este sentido, la lactancia materna no es solo un acto íntimo entre madre e hijo. Es un acto político, una declaración de amor y resistencia. Así como la paz es más que la ausencia de guerra, la lactancia es más que nutrición. Es un lazo que conecta a las mujeres, a las familias y a la sociedad en su conjunto. Les invito a leer este libro”, comentó al finalizar.