Recientemente, El Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR) identificó las estaciones de primavera (mayo) y verano (junio y agosto) como las estaciones con mayor ocurrencia de tornados en San Cristóbal de las Casas.
De acuerdo con este estudio, en comparación a otoño (septiembre) e invierno (enero) los cuales son los meses menos activos en cuanto a estos fenómenos naturales.
ECOSUR consideró a un tornado como una columna de aire en rotación que se extiende desde una nube de tormenta hasta la superficie terrestre.
En 13 años de investigación desde San Cristóbal de las Casas, se documentaron 20 tornados urbanos; lo que permitió crear una base de datos cualitativa basada en observaciones empíricas y entrevistas, lo que ayuda a prepararse mejor y tomar medidas proactivas para minimizar su impacto.
De lo anterior, se identificó horarios de aparición de dicho fenómeno. Aproximadamente a las 1:10pm hasta las 4:38 pm, pero pueden ocurrir en cualquier hora del día.
Según la base de datos del ECOSUR, ocurrió un tornado en 2007, dos en 2009, uno en 2011, dos en 2012, uno en 2013, cuatro en 2014, uno en 2015, dos en 2016 y 2017, así como uno en cada año del 2018, 2019, 2020 y 2021.
De acuerdo con esta información, los días con mayor ocurrencia de tornados son lunes y domingo, seguido de martes y jueves, para finalizar con los de menor que son miércoles, viernes y sábado.
Por último, ECOSUR externó la necesidad de estar preparados en cualquier momento de la semana, del día y del año ante estos fenómenos.
Cabe señalar, para el Sistema Nacional de Protección Civil, San Cristóbal de las Casas está identificado por ser un municipio que ya ha registrado la presencia de tornados en el pasado; en el mapa “Amenaza de tornados”, del portal del Atlas Nacional de Riesgos, se observa que ha habido testimonios de la presencia de tornados en el periodo de 958 a 1822.
Entre sus registros se encuentran: Año 1868. El 15 de septiembre se presenta algo a lo que ellos llamaban “Huracán”, que en realidad se trataba de un tornado seco, en el centro de la ciudad; Año 1869. El 16 de septiembre se presenta una “culebra de agua”, que en realidad es un tornado con lluvia. (Aubry, 2008); Año 1989. Se tiene registro de una “culebra de agua” y logro capturarse una fotografía.
También, el 27 de agosto de 2007. Lluvias y tornado causan daños a casas en Chiapas. En San Cristóbal de las Casas, en la región de los Altos, un tornado derribó cables de energía eléctrica y algunos árboles, y levantó techos de láminas, estructuras metálicas y tejas de varias casas; Año 2014. Durante este año se presentaron tres tornados en el municipio de San Cristóbal de las Casas, el que causó más afectaciones fue el del día 6 de agosto. Y el 3 de julio de 2015.
En 2022, la Organizacion de las Naciones Unidas (ONU), reportó que solo cuatro de cada 10 bebés tenían lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de edad, por lo que estableció como meta subir a por lo menos cinco de cada 10, resaltando su importancia debido a los beneficios que brinda a la salud de los niños y las mamás.
La lactancia se incluye en los objetivos de desarrollo sostenible, haciendo un llamado a garantizar todos los elementos para garantizar su ejercicio en todos los contextos, comentó Georgina Sánchez Ramírez, investigadora del Departamento de Salud de El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) Unidad San Cristóbal.
Contrario a las recomendaciones de la ONU, menos de la mitad de los lactantes se alimentan exclusivamente de leche materna. Por eso, en la Semana Mundial, la lactancia materna se concentra en que todas las madres puedan amamantar a sus hijos.
Carolina Guerrero León, asesora en lactancia materna, dijo que, esta estrategia busca remarcar que todas las mujeres requieren un apoyo puntual que abone para lograr la lactancia exitosa al menos por el primer año.
En el inicio del siglo XX aparecen los primeros derechos de los trabajadores, entre ellos se regula por primera vez el derecho al permiso para lactancia. En la actualidad, la madre trabajadora en etapa de lactancia, por un periodo hasta de seis meses, tiene derecho a dos reposos por día de media hora cada uno, para alimentar a su bebé.
La lactancia se iba heredando como una forma de convivir y existir, las mujeres aprendían viendo, prevalencia la parentalidad, se construía un conocimiento sobre el cuerpo de la mujer a través de la convivencia fluida, pero ha ido cambiando.
El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) realizará la Muestra Internacional de Cine con Perspectiva de Género (Mic Género), del 26 al 30 de agosto, a las 12:30 horas.
La muestra es un proyecto que se ha postulado desde su primera edición, en 2012, como una iniciativa que acerca a la sociedad a través del cine, a las conversaciones contemporáneas sobre feminismos, estudios de género y derechos humanos.
El tour 2024 llega a Ecosur, con cinco filmes iniciando el lunes 26 con Angry Annie del director Blandine: Leonor Annie queda embarazada; como no quiere quedarse con el niño, conoce un movimiento que practica abortos ilegales ante los ojos del mundo, pero se encontrará con aliados y oponentes en el camino.
Martes 27: Nuestro país robado, del director Marc Wiese. Expone las luchas de resistencia ante la minería China en Ecuador y la corrupción del gobierno ecuatoriano en el periodo presidencial de Rafael Correa.
Miércoles 28: La Estrella que perdí, del director Luz Orlando Brennan. Aborda la historia de la actriz Norma Reyes, quien aceptó interpretar todo tipo de roles a lo largo de su vida, salvo el de la madre perfecta.
Jueves 29: Pola Weiss, documental de la directora Alejandra Arrieta. Gira en torno a Pola Weiss, pionera del videoarte y la videodanza en México. Revela la importancia, vigencia de la obra y legado de esta artista poco conocida en nuestro país.
Y el viernes 30: Cuentos para no dormir, de la directora Lila Penagos. Cuando Lila era niña, su padre Carlos le contaba cuentos antes de dormir. Estas historias mezclaban fantasía, un pasado guerrillero y restos de una familia rota.
La invitación es del 26 al 30 de agosto, a las 12:30 horas, en el Auditorio Efraím Hernández, en las instalaciones de Ecosur San Cristóbal.
La milpa intercalada con árboles es un sistema agroforestal que combina cultivos como maíz y frijol con árboles frutales; tiene beneficios como protección del suelo, mejor aprovechamiento de recursos, mayor diversidad de plantas, mayor ingreso para los campesinos; sin embargo, se ha dejado de practicar en muchas comunidades.
Andrea López López, estudiante de la Maestría en Agroecología del Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) Unidad San Cristóbal, realizó la investigación denominada “Caminar la milpa con árboles junto con los saberes de los abuelos en Aldama, Chiapas”.
Beneficios
Señaló que históricamente, la asociación de la milpa con árboles en su municipio ha sido uno de los sistemas mejor utilizados; sin embargo, en los últimos años se ha reducido, pero los saberes sobre los beneficios que aporta persisten entre las personas mayores.
Entrevistó a varias adultos mayores de Aldama y obtuvo un listado de los árboles que había hace aproximadamente 60 años y de los que aún se mantienen en algunas milpas, así como los beneficios que aportan.
Los entrevistados mencionaron un total de 47 especies de plantas leñosas, entre ellas 32 arbustivas y 15 arbóreas, entre frutales, maderables y algunos con uso exclusivo para leña.
Además, mencionaron otros beneficios importantes como la sombra para descansar después del trabajo en la milpa, alimento para polinizadores y aves por sus frutos, mojones para delimitar parcelas, corta viento, aboneros, refugio para las aves.
Falta de interés
Los árboles dentro de la milpa se están perdiendo por falta de interés en los jóvenes, según comentaron los abuelos. A pesar de que ellos parecen no tener esperanza, los abuelos están decididos a apoyar y a seguir reforzando estas prácticas.
Con apoyo de las familias, dialogó con maestros de diferentes escuelas y propusieron promover el establecimiento de un vivero de árboles nativos que existían dentro de la milpa y dar a conocer sus beneficios.
Ecosur y El Colegio de México llevarán a cabo la Jornada Académica “Mirar el mundo con lentes de género”, durante los días 21 y 22 de agosto, en distintas sedes en San Cristóbal de Las Casas. El académico de Ecosur, Juan Iván Martínez, nos da detalles del evento. https://www.facebook.com/humberto.roblesm/videos/1486078878944724
Escrito por Diana Abilene Ahuatzin-Flores y Susana Maza-Villalobos
El mundo a través de los ojos de otros
¿Alguna vez te has preguntado cómo sería ver el mundo a través de los ojos de una hormiga? Esos pequeños organismos que viven ocultos en la hojarasca, que anidan en árboles o bajo la tierra y que son sensibles a cualquier fenómeno (acción/hecho) que altere su hábitat. ¿Qué tal ser un elefante?, un animal enorme que se mueve muchos kilómetros para encontrar refugio, alimento y pareja. Cada uno de estos animales depende de las características de los lugares donde vive, de su tamaño y de qué tan lejos se pueden mover de sus nidos o de sus manadas, y lo que para uno podría ser perjudicial, para otro podría no afectar tanto.
Por ejemplo, una tormenta que puede inundar el nido de la hormiga, para el elefante no representa un peligro. Entonces, si todos percibimos el mundo de diferente manera, ¿cómo podemos estudiar adecuadamente a seres vivos tan variados? Una forma de hacerlo es recurriendo al uso de escalas de espacio o de tiempo, es decir, a la escala ecológica.
¿Qué es la escala ecológica?
La escala ecológica es la delimitación de un espacio físico o temporal de una especie, como la hormiga, el jaguar o el elefante, o de un proceso de nuestro interés, como puede ser la búsqueda de alimento. La escala tiene dos componentes importantes: la extensión, que es el área de observación del fenómeno ecológico que nos interesa conocer; y el grano, que se refiere al grado de resolución o a la unidad de estudio de ese fenómeno, es decir, es la unidad mínima en donde se presenta la especie o el fenómeno que nos interesa.
En la siguiente figura te mostramos las diferencias en extensión y grano. En los paneles A y B se mantiene el tamaño de extensión, pero no de grano; en B el grano es mayor. En A y C el tamaño de grano es igual, pero la extensión es mayor en C. La extensión y el grano son diferentes entre A y D, pero también son diferentes entre B y C. La mayor extensión y el mayor grano se observan en la figura D, mientras que la menor extensión y menor grano en la figura A. Con esto podemos daros una idea más clara de lo que en este artículo hablamos: la escala ecológica y su importancia en el estudio de fenómenos ecológicos.
Para darte una idea de cómo funciona la escala ecológica, imagina que vives en África y deseas conocer el número de nidos de hormigas que hay en la cuadra donde vives, la cual mide 100 x 100 m (10 000 m2), y dentro de esta cuadra haces un muestreo (colecta) en 20 patios que miden 5 x 5 m (25 m2) cada uno. En este ejemplo, tu extensión serían los 10 000 m2 que mide tu cuadra y el grano de observación los 25 m2 que mide cada patio en donde irás a buscar los nidos de hormigas.
Ahora nos vamos a una gran escala. Imagina que lo que te interesa contar son manadas de elefantes… definitivamente, una extensión de 10 000 m2 no sería suficiente, ni mucho menos un grano de 25 m2 para poder estudiarlos. Para esto, tendrías que considerar extensiones mucho más grandes, de cientos de miles de metros cuadrados, como el Parque Nacional de los Elefantes de Addo ubicado en Sudáfrica, el cual mide 1 640 km2, es decir, 1 640 000 000 m2.
Ahora, en términos de escala temporal, imagina que deseas conocer los pájaros diurnos que hay en los parques de tu ciudad, así que, durante todo un año, tú haces caminatas mensuales para registrar a todos los pájaros que logras ver durante cinco horas por la mañana; en este caso, la extensión es un año y el grano son las cinco horas mensuales.
Pero, ¡cuidado!, porque muchas veces llegamos a confundir la escala ecológica con la escala cartográfica, que es una unidad de medición empleada en los mapas y que informa la proporción entre lo real y lo que está plasmado en la imagen. Por ejemplo, una escala cartográfica 1:15000 cm significa que 1 cm del mapa representa 15 000 cm en la vida real.
La importancia de la escala ecológica
Recordando a la hormiga y al elefante, nos damos cuenta de que las escalas de estudio para ambos animales son distintas. Para saber qué tamaño de área (escala espacial) o lapso (escala temporal) debemos usar para conocer el comportamiento de una hormiga o de un elefante, tenemos que conocer las características de las especies o de los fenómenos ecológicos que queremos estudiar. Mientras que para estudiar hormigas unos cientos de metros cuadrados son suficientes, para los elefantes esa superficie es inútil. Así pues, es muy importante encontrar una escala correcta de estudio, ya que, algunos procesos o fenómenos naturales que funcionan en una escala de tiempo o espacio, pueden no funcionar en otra escala, ni ser igual para diferentes especies. Aunque no hay una receta para seleccionar la escala correcta, tener conocimientos básicos del fenómeno y/o de la especie que deseamos estudiar nos servirá de mucho.
De lo pequeño a lo grande: escala local y de paisaje
Para la hormiga que es un animal diminuto y que vive en lugares muy pequeños, en la hojarasca o el suelo, las características locales de su pequeño ambiente son muy importantes, como puede ser el tipo de suelo en donde construyen su nido, la cantidad de luz o sombra que llega a este, así como la humedad de la tierra, la temperatura ambiental y la microtopografía en donde anida. Este nivel microambiental, también conocido como nivel o escala local, es una escala de estudio delimitada por un espacio fino o pequeño, de apenas unos cuantos metros. En términos temporales, la microescala es de periodos de tiempo cortos como horas o días, ya que el ciclo de vida de algunas especies es reducido, por ejemplo, el ciclo de vida de una hormiga arriera (Atta cephalotes) es de solo 90 días, siendo vital lo que suceda en ese tiempo.
La escala de paisaje, en términos espaciales, se caracteriza porque la variación ambiental está determinada por muchas coberturas de suelo que abarcan mayor superficie que solo unos metros cuadrados, por ejemplo, la cantidad de bosque, de potreros para ganado y de zonas urbanas que puedes ver sobre una montaña cuando sales a carretera, o por la ventana del carro o del avión cuando sales de viaje. Todas estas diferentes coberturas del suelo que ves en esa gran superficie de territorio son importantes para el movimiento y la supervivencia de muchas especies.
Por ejemplo, para los jaguares (Panthera onca), la presencia de montañas, ríos, vegetación conservada y de asentamientos humanos resulta relevante para sus rutas de movimiento; estos felinos recorren varios kilómetros al día en busca de agua y alimento, por lo que es importante considerar todo lo que hay en sus paisajes. En términos temporales, hay muchos procesos que tienen una escala de tiempo más larga, por ejemplo, la recuperación de la altura de los árboles de bosques tropicales lluviosos, como la Selva Lacandona en Chiapas, que puede tardar más de 50 años, el ciclo de vida del elefante africano (Loxodonta africana) que es de 70 años o la floración del bambú negro (Phyllostachys nigra) de Asia que tarda 120 años. En este nivel, los organismos que son de talla grande y más longevos se ven afectados por la transformación del hábitat y la pérdida de bosque. Sin embargo, el paisaje también puede tener efecto sobre pequeños organismos como las hormigas. Imagina qué especies de hormigas podemos encontrar en un paisaje que está formado por diferentes coberturas de suelo (potreros ganaderos, selva conservada, ríos), seguramente la diversidad será variada. Mientras en potreros es posible que encontremos pocas especies de hormigas, es probable que en las zonas selváticas el número de especies sea mayor y que, además, las especies sean diferentes entre una cobertura de suelo y otra.
Algunas aplicaciones de la escala ecológica
Además de que la selección de la escala correcta nos permite tener información científica más certera, actualmente, la pérdida de hábitat y la fragmentación están creando paisajes con remanentes de bosque rodeados de coberturas de suelo como pastos y ambientes urbanos que dificultan el movimiento de muchas especies, ya sea para la búsqueda de alimento, para aparearse, polinizar o incluso para protegerse, lo cual los pone en peligro. Para evitar el aislamiento de las poblaciones de flora y fauna, algunas especies representativas como el jaguar (también llamadas especies sombrilla o especies bandera) son estudiadas, ya que conociendo sus hábitos y movimiento en el paisaje es posible proponer corredores biológicos. Estos corredores son áreas que conectan dos o más regiones y son relevantes para la conservación, puesto que ya no solo son puntos donde estas especies en peligro de extinción transitan, sino que conservan a una gran diversidad de especies en zonas con alta protección federal.
La escala es un concepto de gran relevancia en estudios ecológicos, ya que nos permite determinar los límites de un proceso o fenómeno. Gracias a la escala podemos evaluar correctamente la respuesta de las especies bajo diferentes escenarios y, tengamos en cuenta que, cada especie y proceso es diferente.
Recuerda que en ecología el tamaño sí importa, pues lo que sucede en tu escala impactará de diferente manera a la gran diversidad de especies y procesos que se desarrollan en diferente espacio y tiempo.
Agradecimientos
Al proyecto «Moderación del paisaje sobre patrones de biodiversidad: contribución a la teoría ecológica del paisaje» (320718) financiado por Ciencia Básica y/o Ciencia de Frontera: Paradigmas y Controversias de la Ciencia 2022, CONACYT.
En México del total de municipios y demarcaciones territoriales, solo en 985 se da algún tratamiento al agua residual para reutilizarla, y este es tan solo el 40 %. Los principales contaminantes de estas aguas son el nitrógeno y fósforo, compuestos orgánicos, bacterias coliformes fecales, materia orgánica y muchos otros.
René Alejandro Flores Estrella, investigador del Departamento de Ciencias de la Sustentabilidad de El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) Unidad Tapachula, comentó que el tratamiento de aguas residuales de bajo consumo energético es una alternativa viable.
Normas
Para el tratamiento de aguas residuales se debe cumplir las normas que establece la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat); si ya son enviadas a cuerpos de agua superficiales la norma 001, si son reutilizadas deben apegarse a la 003.
Existen industrias que deben tener su propia planta de tratamiento, como los rastros municipales, porque generan un tipo de residuos que si son vertidos directamente al alcantarillado pueden generar una contaminación muy grave. Otras actividades son curtidoras y talleres automotrices.
Para tratar las aguas domesticas y municipales existen diversas tecnologías, desde convencionales hasta altamente mecanizadas que demandan un gran consumo energético, con elevados costos de construcción, operación y mantenimiento, pero también hay tecnologías ecológicas de bajo costo.
Tratamientos
Las aguas residuales domesticas son aquellas que provienen de las descargas de viviendas, edificios comerciales e institucionales; las no domesticas se generan en la industria, pero en una actividad productiva, comercial o de servicio, tienen mayor contenido de materia orgánica y otros nocivos.
Los costos de una planta de tratamiento van en la inversión y el funcionamiento, se requieren estudios preliminares, diseño de ingeniería, construcción, terreno; después, la operación y administración, que en general pueden ser muy alto, según la tecnología usada.
En Chiapas existen varias especies de búhos, entre ellas se encuentran el pigmeo, aurorita y cornudo, este último de los más grandes de toda América; en algunas regiones desafortunadamente son consideradas aves de mal augurio, pero cumplen con una función biológica muy importante.
Héctor Isaías Cruz Luna, estudiante de la Maestría en Ciencias en Recursos Naturales y Desarrollo Rural, del Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) Unidad San Cristóbal, realizó la investigación denominada “Ocupación de búhos en un bosque tropical perennifolio en el sureste”.
Regulan las poblaciones
Señaló que, estudiar la ocupación de depredadores tope como los búhos es crucial, pues estos regulan las poblaciones de las presas que consumen. Los estudios ecológicos evalúan la distribución y abundancia de especies de difícil ubicación.
En seis meses estimó la ocupación y la probabilidad de detección de aves rapaces nocturnas y su relación con las variables ambientales, estructurales y fisiográficas en un bosque tropical perennifolio, ubicado en el ejido Plan de Ayala, en la Reserva de la Biósfera El Triunfo.
Detalló que obtuvo información sobre presencia/no presencia de las especies a través de 60 puntos de conteo y nueve Unidades de Grabación Autónoma (UGAs) en seis transectos con diferente composición estructural de la vegetación.
Se registraron tres especies: Megascops trichopsis, Glaucidium brasilianum y Strix virgata. La especie que presentó mayor ocupación fue G. brasilianum, mientras que M. trichopsis presentó la menor.
La ocupación de S. virgata y M. trichopsis se relacionó con sitios de potreros asociados a bosques y temperaturas variables, mientras que la ocupación de G. brasilianum se asoció con campos agrícolas y variables de la vegetación.
Dijo que solo se registraron dos señales acústicas de S. virgata y una de G. brasilianum. Debido a los pocos registros no fue posible generar un historial de encuentros y estimar índices de ocupación confiables.
Esta entidad federativa en la zona Altos, de acuerdo al censo realizado en 2020, la habitan grupos originarios tseltales y tsotsiles, quienes representan el 25 % de las personas de la región, y es el estado con el menor índice de grados cursados por habitantes menores de 15 años en todo el país. Debido a ello, el hecho de que docentes indígenas y/o que laboran en escuelas bilingües de la región, cursen un posgrado para la profesionalización y la mejora de su práctica, a pesar de la desigualdad educativa y por lo tanto estructural que afecta a las personas que viven en el estado más pobre y con mayor rezago en el país, es digno de reconocerse y difundirse.
Este foro es un componente curricular importante de la MEB, es parte formativa de los docentes que cursan este posgrado de profesionalización en educación y son en su mayoría hablantes en primera lengua de tsotsil y tseltal. La ponencia inaugural “Herramientas para la sistematización de experiencias educativas”, estuvo a cargo del Dr. Antonio Saldivar Moreno, director de El Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR).
El Dr. Saldivar, expuso algunas ideas que ha desarrollado sobre educación, con gran empatía y cercanía, compartió los anhelos que tuvo de ingresar a la Normal y convertirse en profesor de primaria, inspirado por su maestro de la infancia “Antonio”, quien le dejó recuerdos entrañables sobre lo que significa aprender en la escuela y en la vida. “La educación nos brinda la oportunidad de continuar aprendiendo. Cuando estamos abiertos a la experiencia de aprender, hasta un niño o niña pequeña puede dejarnos un gran aprendizaje, por ello habrá que cuestionarse la inminente responsabilidad de la educación para recuperar su capacidad de formar mejores personas”.
Reflexionó sobre la necesidad de reconocer que tenemos una situación de crisis, la educación que se imparte desde la escuela está perdiendo la capacidad de incidir en la atención de los problemas más importantes que enfrentamos como sociedad. A pesar de tener mayor cobertura desde educación básica hasta posgrado a nivel nacional, se han agravado problemas de violencia, crisis ambiental, etcétera. En general, se piensa que la educación es un mecanismo de movilidad social. Pero en ciertos contextos, la educación está siendo el pasaporte para salir de su comunidad, dejar atrás su lengua, su cultura, en lugar de ser una fortaleza comunitaria, me expulsa y se convierte en una herramienta para olvidarnos de lo que somos, principalmente en el contexto indígena.