Se generó una propuesta de manejo genético en vida libre y en cautiverio del tapir y pecarí, con el propósito de aportar información sobre el estado actual de la diversidad y estructura genética de sus poblaciones, así como de sus niveles de endogamia por parte del investigador de El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), Fredy Alberto.
En la investigación del doctor en ciencias titulada “Ecología poblacional y amenazas para la conservación del tapir (y el pecarí de labios blancos) en la Selva Lacandona”, encontró que los tapires se segregaron espacio-temporalmente de los pecaríes; en cuanto al uso del hábitat, los pecaríes fueron diurnos mientras que los tapires fueron más nocturnos y activos en el bosque continuo dentro del área protegida.
También obtuvo que la presencia y abundancia del tapir y el pecarí de labios blancos estuvo asociada con la presencia y cercanía del agua, caminos y carreteras.
Otro de los hallazgos es que las principales carreteras asociadas a paisajes agrícolas son las principales barreras para los movimientos de tapires y pecaríes de labios blancos en la Selva Maya.
En cuanto a la conservación genética del tapir en México, el especialista propuso un programa de manejo de cinco fases consistentes en evaluaciones genéticas y poblacionales/demográficas para generar mapas de cruzamiento de individuos/ejemplares.
Así como de la planificación para la reintroducción de la especie en sitios con las condiciones requeridas. Se espera que esta información contribuya a orientar las acciones de conservación para mejorar o mantener la viabilidad de las poblaciones aisladas de ambas especies en la Selva Maya.
El tapir centroamericano y el pecarí de labios blancos habitan en la Selva Maya, comprendida entre el Sureste de México, el norte de Guatemala y Belice.
Esta región representa el principal bastión para ambas especies en Mesoamérica; no obstante, los procesos de deforestación y fragmentación de los bosques tropicales que han ocurrido en la misma durante las últimas décadas, han ocasionado severas reducciones en las poblaciones de ambos mamíferos.
La pérdida de conectividad entre los hábitats principales del tapir y el pecarí de labios blancos en la Selva Maya limita su flujo genético a través del paisaje, generando cambios en la distribución y abundancia de sus poblaciones que pueden desembocar en extinciones locales.
La distribución y la abundancia de los organismos son variables de estado, aspectos fundamentales de evaluar en ecología de poblaciones, los cuales cambian el tiempo y el espacio de forma dinámica.
De aquí el interés y la necesidad de realizar evaluaciones periódicas de la ecología poblacional de especies vulnerables a los cambios en la configuración del paisaje.
NOTA PUBLICADA EN https://www.cuartopoder.mx/chiapas/realizan-propuesta-de-manejo-del-tapir-y-pecari/485934