Por Limbania Vázquez Nava
El jueves 10 de abril nos encontramos tres programas educativos alternativos en posgrado: la Maestría en Educación Intercultural para la Sustentabilidad, la Maestría en Educación y Comunicación Ambiental Participativas y la Maestría en Agroecología de ECOSUR.
Recibimos el día mirándonos a los ojos en el huerto de la Unidad San Cristóbal de Ecosur. Nos tejimos en la trama de los sueños, ahí nos reconocimos tejiendo como un gran micelio opciones de vida buena junto a otras y otros en los territorios. Nos dimos cuenta de que estos sueños son sostenidos por presencias colectivas, acompañadas por preguntas rebeldes, gozosas, transgresoras, desafiantes; cada hermoso sueño es un anuncio de un presente otro, son anuncios de que ya estamos siendo el mundo que deseamos ver. Como todo micelio se despliega en la trama colectiva, es decir, en la interconexión que vamos estableciendo, es silencioso, a veces, imperceptible pero lleno de música, canto y color. Los sueños son brújulas de caminos en los que se requiere de valentía y rebeldía para ser transitados.
En este encuentro nos dimos un espacio para hacer una lectura al cruce de nuestros caminos, invocamos al gran Sak bej, ese camino que elegimos como apuesta política pedagógica. Desde ese lugar nos leímos, y lo hicimos ubicando las cruces, las estrellas, las piedras y mojoneras. Nos dimos cuenta de que nuestros programas son también una declaración de otros modos urgentes de hacer una educación en posgrado que contribuya a los desafíos socioambientales actuales.


