César Antonio Irecta Nájera
cirecta@ecosur.mx
Rosario García Miranda
rgarcia@ecosur.mx
- En este proyecto se contó con la participación de 539 familias con niñas y niños de 2 a 16 años de edad, 276 familias pertenecen a la zona fronteriza de Chiapas y 263 familias a la zona centro de Tabasco
ROSARIO GARCÍA MIRANDA * Y CÉSAR A. IRECTA NÁJERA
En el marco del día de la niñez que celebramos en México el 30 de abril, queremos referirnos a una investigación que actualmente estamos desarrollando en El Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR) a partir de los hallazgos reportados por el proyecto Factores asociados a las dislipidemias en población infantil de las regiones fronteriza de Chiapas y centro de Tabasco, CONACYT (APN2016-2607), llevado a cabo de 2018 al 2021 y que da cuenta de algunos problemas de salud que enfrenta la población infantil en dos entidades del sur-sureste de México.
En este proyecto se contó con la participación de 539 familias con niñas y niños de 2 a 16 años de edad, 276 familias pertenecen a la zona fronteriza de Chiapas y 263 familias a la zona centro de Tabasco. A todas las niñas y niños participantes se les realizaron diferentes evaluaciones de salud y se encontró que más del 50% presentaban problemas de sobrepeso y obesidad, y que de estos, el 49% tenía alteraciones en sus niveles de triglicéridos.
Por otro lado, en 2018, el INEGI reportó que a escala nacional 38.4% de la población de 12 a 19 años de edad sufre de sobrepeso y obesidad, porcentaje más alto para las mujeres (41.1%) que para los hombres (35.8%). Muchos de los cuales son candidatos, en un futuro cada vez más cercano, a padecer diabetes, una de las enfermedades crónicas no transmisibles más comunes. Lo anterior, dado que, entre otras relaciones causales, el riesgo de ser diábetico es hasta tres veces mayor en las personas con obesidad.
¿Quién se encarga del cuidado de las niñas y niños con enfermedades?
El cuidado de las personas que padecen alguna enfermedad implica una serie de actividades en torno a la gestión de recursos para mantener la vida y la salud de quienes se cuida.
El Estado representa el garante del bienestar de la población que lo conforma y tiene el rol fundamental de articular las políticas, mediante acciones públicas referidas a la organización social y económica para garantizar el bienestar físico y emocional cotidiano de las personas afectadas por alguna enfermedad crónica y con algún nivel de dependencia.
La necesidad del cuidado no puede esperar a que haya condiciones ideales, los cuidados deben continuar durante y a lo largo de una crisis y, por muy desafiante que parezca, también en medio de crisis humanitarias y de salud pública, como la pandemia de COVID-19, que aumentó, en lugares con una fragilidad preexistente, las vulnerabilidades y agregó nuevos factores estresantes y desafíos para las personas cuidadoras.
Cuidadores no profesionales de pacientes crónicos
En el caso de los trastornos crónicos en México, como en la mayoría de los países, la importancia de la participación de la familia es fundamental para el éxito de las intervenciones y de la atención y gestión de la enfermedad.
Nuestro país carece de un sistema integral de cuidados para los grupos dependientes, por lo que son atendidos por personas de sus familias y principalmente por mujeres, quienes no reciben remuneración alguna y cuentan escasos o nulos apoyos gubernamentales. De esta manera, los familiares se convierten en cuidadores no profesionales.
Por cada enfermo o enferma crónico siempre habrá una cuidadora o cuidador familiar y el trabajo de cuidados que reciba marcará su devenir.
Hacia una estrategia nacional del sistema de cuidados no profesionales de pacientes crónicos
A partir de lo señalado vemos la necesidad de que en México se cuente con una estrategia nacional del sistema de cuidados no profesionales.
En la investigación que realizamos actualmente, tomamos como base a las familias de las niñas y niños con problemas de sobrepeso y obesidad que participaron en el proyecto antes referido e identificamos a sus cuidadores familiares. Los resultados arrojaron que mayoritariamente son madres y padres, aunque también abuelas, tías y otras personas las que ejercen la labor del cuidado sin percibir remuneración económica.
Durante la primera fase del nuevo proyecto realizamos narrativas con 12 familias y 22 entrevistas en líneas con las personas cuidadoras de los participantes del estudio previo en Chiapas.
Nuestro objetivo general es aportar conocimiento sobre los procesos y necesidades en el cuidado de pacientes crónicos menores de edad derechohabientes del ISSSTE con enfermedades crónicas no transmisibles con base en las experiencias de sus cuidadores no profesionales para incidir en el desarrollo de un sistema nacional de cuidados.
Con la información recopilada a partir de las experiencias de las personas cuidadoras familiares haremos aportes empíricos que abonen al desarrollo y formulación de una estrategia nacional del sistema de cuidados no profesionales en México. Igualmente apuntamos a que toda la evidencia recopilada en los trabajos de investigación que realizamos coadyuve a mejorar y hacer más eficaces las estrategias de comunicación en salud y movilización del conocimiento y contribuya al bienestar de la población, particularmente de las familias con menores con enfermedades crónicas no transmisibles.
En el equipo de investigación participamos Rosario García Miranda, postdoctorante del Departamento de Salud de ECOSUR, Dr. César Irecta, investigador del Departamento de Salud de ECOSUR; Armando Contreras, director del Hospital ISSSTE Comitán; Paola Cruz, doctoranda de ECOSUR y Héctor Ochoa, investigador del Departamento de Salud de ECOSUR.
* Posdoctorante del Departamento de Salud de ECOSUR
** Investigador del Departamento de Salud de ECOSUR