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Una selva con historia…

Artículo de divulgación

Una selva con historia…

9 enero, 2017

Alejandro Morón, investigador del Departamento de Conservación de la Biodiversidad

La zona arqueológica de Calakmul, que se ubica en la zona sur del estado de Campeche, es un gran atractivo turístico, cada vez más visitado, y un importante lugar para la ciencia. Los vestigios de este antiguo reino prehispánico se encuentran enclavados en la Reserva de la Biósfera de Calakmul, la más grande del país (722,925 ha), la cual es accesible por carreteras recientemente remodeladas y ensanchadas, e incluso por caminos bien pavimentados que van al interior de la selva.

En toda esta región, El Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR) desarrolla y ha desarrollado diferentes proyectos de investigación, que abarcan desde aspectos antropológico–sociales hasta inventarios de algunos grupos de insectos, pasando por proyectos con aves y mamíferos en peligro de extinción. (Ver listado de algunos proyectos al final del texto).

Calakmul fue una ciudad-estado que perduró por más de 1500 años y que tuvo a su alrededor al menos a otras cinco ciudades-estado las cuales le rendían tributo, sus habitantes eran sus vasallos y sus tributos y mano de obra le permitieron a la élite de Calakmul construir enormes edificios, como la ahora llamada “Estructura II”.

El nombre de “Calakmul” le fue dado por uno de sus primeros visitantes “modernos” y quiere decir “entre dos cerros o lomas”; sin embargo, de acuerdo con descubrimientos recientes de arqueólogos y epigrafistas, su nombre real debió ser algo similar a “el reino de la cabeza de serpiente”.

Cosechando chiles
Cosechando chiles. Alejandro Morón, Armando Alayón y Yuriko Cruz.

Cabe destacar que esta zona no siempre fue tan accesible y que llegar a muchos de los sitios donde hoy es sencillo introducirse, era —hasta hace algunos años— casi una aventura, intentada por muy poca gente. Por ello, me interesa presentar una breve historia en la que describo cómo era esta zona y los accesos que tenía, además de mostrar que prácticamente toda la península de Yucatán fue una gran selva, la cual actualmente es difícil imaginar.

Hoy, la totalidad de la península de Yucatán es un mosaico con diferentes usos del suelo, pues si bien existen grandes áreas de selva, como la reserva de Calakmul, éstas se encuentran rodeadas por campos de cultivo, pastizales inducidos, poblados, carreteras, caminos, áreas de cultivo abandonadas y degradadas, y por zonas de desarrollo urbano.

Aproximarse a la historia de lo qué había, cómo eran aquellos lugares, qué poblados existían y cómo se acercaba la gente de fines del siglo XIX y de la primera mitad del siglo XX a esta región, no es sencillo, pues las fuentes son escasas, dispersas y mencionan vagamente algunos detalles del paisaje, de las rutas, de las distancias o de los transportes.

Mapa Región Campeche
Mapa Región Campeche

Por empezar en algún punto, el poblado que ahora se llama Escárcega —llamado así en honor al Ing. Francisco Escárcega Márquez, quien dirigió inicialmente la construcción de la línea del ferrocarril Coatzacoalcos-Mérida en el estado de Campeche— no existía antes de 1940, en dicho lugar solo había selva.

Posteriormente, se estableció ahí el campamento chiclero “Km 47”. En estos años, la extracción de la resina o látex del árbol del chicozapote, es decir, el chicle, era tan importante que generaba prácticamente la totalidad de los ingresos del gobierno del estado de Campeche.

En el sur–sureste del territorio campechano abundaban los árboles de chicozapote que formaban parte de las selvas que cubrían esta región. La extracción del látex se hacía marcando en zig-zag la corteza de los árboles y colocando en su base una bolsa de lona que captaba el látex, después se recogía y el chiclero, la persona que hacía esta labor, lo llevaba a un campamento. En estos campamentos se juntaban las marquetas de chicle y era el lugar donde vivían los chicleros, capataces y cocineras por aproximadamente seis meses que era el tiempo que duraba la temporada de extracción.

Tapir en Calakmul Rafael Reyna
Tapir en Calakmul. Rafael Reyna.

Antes del trazo del ferrocarril Puerto México-Mérida, hoy Coatzacoalcos-Mérida, no había forma de ingresar a la zona sur del estado de Campeche, mas que por veredas o por barcaza, como lo había hecho The Laguna Corporation (Compañía maderera y chiclera de los Estados Unidos de América), desde El Carmen a través de la Laguna de Términos hasta el sitio llamado Pital, y desde ahí por tren de vía angosta, construido por la misma compañía años antes, hasta el campamento que la empresa también construyó como el principal centro de operaciones y que se llamó campamento Matamoros.

El otro acceso a la zona de Calakmul era por lancha, se embarcaba en Champotón y se navegaba a través del río Champotón hasta el poblado de Canasayab, luego hasta otro lugar llamado “La Gloria” y de ahí hasta una central chiclera llamada “Bonfil”. Esta fue la ruta de la expedición de Sylvanus Morley y de C.L. Lundell en la década de 1930, Morley fue un arqueólogo y epigrafista que visitó y describió parcialmente las ruinas de Calakmul, y Lundell un botánico que recolectó ejemplares de plantas en el sur de México y Centroamérica para una institución de Washington, DC, Estados Unidos, a él se atribuye el descubrimiento de las ruinas de Calakmul.

La ruta por el entonces llamado Partido del Carmen, hoy municipio de Ciudad del Carmen, había sido utilizada por los madereros, desde mediados a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Otro sitio de ingreso al sur peninsular era por el poblado de Dzitbalchén, en el actual municipio de Hopelchén, que se ha llamado “la montaña” y que era utilizado por los chicleros para ingresar a la selva y a las zonas de explotación. Un campamento chiclero al sur de aquella zona, que tal vez se formó hacia principios del siglo XX, se convertiría en el actual poblado de Xpujil, cabecera del municipio de Calakmul, y al que se llamó así debido al nombre maya de una aguada cercana al mismo, cuya traducción es “cola de gato”. El término aguada se refiere a una depresión en el terreno, de tamaño variable, en la que se acumula el agua de la lluvia y usualmente se mantiene por algunos meses.

Lindero bajo Balamku
Lindero bajo Balamku. Alejandro Morón.

Cerca de este sitio se fundó el actual poblado de Zoh-laguna, en 1947, por iniciativa de una empresa maderera de Yucatán, llamada “Maderera del Trópico”. El primer viaje de exploración a esa zona se realizó en 1946, cuando ya se había hecho la brecha de lo que sería la carretera Escárcega-Chetumal. Vale la pena mencionar que esta empresa maderera fue el frente de apertura y colonización del oriente del estado de Yucatán, que desde la década de los 30 se dedicaba a la explotación de caoba y cedro fundamentalmente. Para tener una idea de su tamaño, es importante mencionar que el dueño de la “Maderera del Trópico” tenía una concesión de 75,000 hectáreas en el oriente de Yucatán y en el período 1940–1945 esta compañía cortó 190, 962 árboles con un volúmen total de 389,925 m3.

Por el lado este de la región —el sur del actual estado de Quintana Roo—, las brechas y caminos en la selva existían desde siglos antes; algunos de ellos formaban parte de la red de caminos desarrollada por el pueblo maya, a través de los cuales los comerciantes llevaban sus productos de un lugar a otro. Esta región también fue territorio dominado por los indios rebeldes que huían de los blancos e iban hacia la región del Petén-Itzá, en la actual república de Guatemala. Durante el periodo colonial esta parte de la península fue zona de dominio de los indios rebeldes, quienes realizaban con los ingleses —en lo que hoy es Belice— el intercambio de madera de caoba, cedro y palo de tinte, por armas, pólvora y perdigones.

Parte de la zona descrita comprende poco más de 37,400 km2 del estado de Campeche, es decir, el 64% de la extensión de su actual territorio. 18,760 km2 de la superficie correspondiente al sur del estado de Quintana Roo, lo que es el actual municipio de Othón P. Blanco, y 2,065 km2 que corresponden a la mitad del actual municipio de Tizimín, en el estado de Yucatán. 58,225 km2, equivalentes a poco más de la superficie de los estados de Puebla y Tlaxcala juntos, de selva aprovechable desde el punto de vista maderero y de la extracción del chicle.

Luciano Pool
Calakmul, Campeche, México. Luciano Pool.

El tipo de selva a la que me refiero técnicamente se le denomina “selva mediana”, en la que crecen especies como la caoba, el cedro y el chicozapote. Si consideráramos la selva más seca del norte de la península de Yucatán, el área sería prácticamente igual a la superficie de los tres estados que conforman la península.

Esta inmensa área fue durante más de 15 siglos el espacio geográfico en donde nació y se desarrolló la cultura maya y, sin lugar a dudas, puede ser considerado como el laboratorio natural en donde se perfeccionó el uso de los recursos naturales de la zona, sin que éstos llegaran a agotarse. A final de cuentas, el ser humano sólo tenía y tiene prestado el uso del monte, que conforme la cosmovisión maya, en sus más antiguas creencias, pertenece sólo a los señores del monte y está resguardado por los aluxoob o guardianes del monte. Quizá por esto es que prevalece hasta nuestros días y podemos considerarla como una selva con historia.

Proyectos desarrollados en Calakmul por ECOSUR:

  • Vulnerabilidad de la agricultura de pequeños productores en Calakmul, Campeche, México.
  • Producción del huerto familiar y sustentabilidad energética en Calakmul, Campeche, México.
  • Especies de plantas y sus usos en huertos familiares de pequeños productores migrantes mayas y mestizos en Calakmul, Campeche, México.
  • Redefiniendo los bosques secundarios en la legislación forestal mexicana: implicaciones para el manejo, restauración y conservación.

 

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